Durante la reunión del Consejo Nacional Espacial del pasado diciembre, Phil Gordon, asesor de seguridad nacional de la vicepresidenta Kamala Harris, encargó al director de Inteligencia Nacional que elaborara una propuesta nacional sobre las normas mínimas de ciberseguridad para proteger los sistemas espaciales. Aunque se trata de un avance bienvenido, la administración Biden también debería considerar una segunda línea de esfuerzo para facultar a la NASA y al Departamento de Estado para liderar un esfuerzo de trabajo con la Coalición de los Acuerdos Artemis para elaborar una propuesta internacional sobre las mejores prácticas de ciberseguridad para los sistemas espaciales. En concreto, la administración debería centrarse en desarrollar la seguridad de la misión y los principios de diseño para proteger tanto el vehículo espacial como el segmento terrestre de las ciberamenazas. El programa de exploración espacial Artemis, cuyo objetivo es devolver seres humanos al polo sur lunar en septiembre de 2026 y apoyar la primera misión tripulada a Marte, entre otras misiones, podría ayudar a reunir a múltiples partes interesadas de otra forma relacionada: avanzando en las mejores prácticas de ciberseguridad para sistemas espaciales.
Los Acuerdos Artemis y el Programa de Exploración Espacial
Hasta la fecha, 36 naciones se han comprometido a apoyar los Acuerdos Artemis, un marco voluntario multilateral y no vinculante compuesto por nueve principios creados para promover la exploración pacífica y sostenible del espacio ultraterrestre. Estos estados también han respaldado el programa de exploración espacial Artemis, que se estableció en octubre de 2020, con socios de coalición de Australia, Canadá, Italia, Japón, Luxemburgo, Emiratos Árabes Unidos, Reino Unido y Estados Unidos. Uruguay es el signatario más reciente desde el 15 de febrero de 2024. Durante la ceremonia formal de firma entre representantes de Uruguay y Estados Unidos en la sede de la NASA, funcionarios del Departamento de Estado se hicieron eco del llamamiento de la administración Biden para ampliar las alianzas espaciales internacionales y facilitar el intercambio de información para promover la seguridad.
Aparte de los Acuerdos, la primera misión tripulada alrededor de la Luna del programa de exploración espacial, Artemis II, está prevista para septiembre de 2025. Se prevé que esta misión tripulada de cuatro personas orbitará la Luna en aproximadamente diez días.
Como parte de este programa, la Coalición de los Acuerdos Artemis también podría contribuir a dar forma al debate sobre la reducción de las vulnerabilidades cibernéticas de los sistemas e infraestructuras espaciales. Tal vez podría crearse un grupo de trabajo dentro de Artemis para elaborar una guía mundial de buenas prácticas para proteger los sistemas espaciales de posibles ciberamenazas y vulnerabilidades. El Comité Internacional sobre los Sistemas Mundiales de Navegación por Satélite (ICG), organizado en el marco de la ONU, también podría servir de punto focal para los intercambios relacionados con la elaboración de una guía mundial de mejores prácticas para los Sistemas Mundiales de Navegación por Satélite (GNSS).
El pasado otoño, el comité convocó en Madrid (España) su 17ª reunión anual con representantes de GNSS de los principales proveedores de servicios para debatir los términos de referencia del ICG para promover el uso y la aplicación de GNSS a nivel mundial. A partir de estas diversas comunidades de expertos, existe potencial para impulsar la cooperación mundial en torno a los principios de higiene de la ciberseguridad para los sistemas espaciales, mitigar el acceso no autorizado a las funciones críticas de los sistemas espaciales y gestionar los riesgos de la cadena de suministro. En este sentido, el Marco Estratégico para la Diplomacia Espacial del Departamento de Estado de Estados Unidos reconoce la creciente interdependencia entre las amenazas cibernéticas y espaciales, y fomenta la colaboración estratégica entre múltiples sectores. El Departamento de Estado también considera los Acuerdos de Artemis como una "pieza central de la diplomacia espacial civil de Estados Unidos", para promover un orden internacional basado en normas.
Generar debates en los foros multilaterales
Convocar un grupo de trabajo internacional en torno a estas cuestiones bajo los auspicios de Artemis también podría generar diálogos globales más profundos en otros foros multilaterales, como la Comisión de las Naciones Unidas para la Utilización del Espacio Ultraterrestre con Fines Pacíficos (COPUOS de la ONU), en torno al desarrollo de capacidades duales en el ciberespacio. Los esfuerzos para mejorar la seguridad y la fiabilidad de las operaciones espaciales benefician a la NASA, a los socios internacionales y a otros que trabajan en la exploración y el desarrollo del espacio. Estos beneficios incluyen la ampliación de la integración con aliados y socios para aumentar el intercambio de información, mejorar la resistencia de los sistemas y promover la sostenibilidad espacial de las actividades espaciales.
La sostenibilidad en este ámbito se entiende generalmente como el mantenimiento de la capacidad de operar en el espacio en el futuro, y "de una manera que haga realidad los objetivos de acceso equitativo a los beneficios de la exploración y utilización del espacio ultraterrestre con fines pacíficos", según las Directrices de 2019 para la sostenibilidad a largo plazo del espacio ultraterrestre de la COPUOS de las Naciones Unidas. Sorprendentemente, estas directrices no mencionan la ciberseguridad, que es un componente esencial para apoyar el ciclo de vida de la ingeniería en el desarrollo de sistemas espaciales sostenibles, seguros y resilientes. Aquí radica una oportunidad de creación de capacidad para identificar las mejores prácticas para salvaguardar los activos espaciales y su infraestructura de apoyo de las amenazas cibernéticas. Según el Consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, la cooperación internacional será "aún más importante a medida que evolucionen tanto las oportunidades en el espacio como las amenazas, en y para el espacio".
A medida que evolucionan estas amenazas, también lo hacen las oportunidades de colaboración en materia de seguridad. En resumen, la Coalición de los Acuerdos de Artemis, junto con el trabajo del ICG y la COPUOS de la ONU, podría servir como un importante convocador para apoyar la creación de capacidades cibernéticas en las misiones espaciales. Para detectar las ciberamenazas a los sistemas espaciales y responder a ellas es fundamental mejorar la colaboración entre sectores y ámbitos.
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